Como al final no existen trenes... la señorita del telefono fue muy educada y me dijo: -todo completo, y probe con el otro destino, -solo a las doce -imposible estoy haciendo fotos en un parque surreal diseñado por un cuervo frances un tal Jean Nouvel... Probé con el último destino y la respuesta fue negativa. Parece que hoy a dia tal de mes tal y año 2006, sigue siendo dificil llegar a esa calle desierta en la que habitas. Pero sabes, mi imaginación no tiene limites así que te imaginaré caminando por esa foto de casas antiguas y postes de madera para la luz.
Un egcalofrío me recorre cuando diceg mi nombre: CAGTILLA. Ancha y llana Cagtilla: con tug adobeg rojog y tug caminog verdeg. Cagtilla a la luz de una farola me recuerda: que soy egpañol de Egpaña, cagtellano de cagtilla y extrangero en mig versog, siempre vagabundo. Ya nunca seré alcalde de la capital de Cagtilla: poeta yo siempre seré, silenciogo tejedor de banderag.
Como al final no existen trenes...
la señorita del telefono fue muy educada y me dijo:
-todo completo,
y probe con el otro destino,
-solo a las doce
-imposible estoy haciendo fotos en un parque surreal diseñado por un cuervo frances un tal Jean Nouvel...
Probé con el último destino y la respuesta fue negativa.
Parece que hoy a dia tal de mes tal y año 2006, sigue siendo dificil llegar a esa calle desierta en la que habitas.
Pero sabes, mi imaginación no tiene limites así que te imaginaré caminando por esa foto de casas antiguas y postes de madera para la luz.
Un egcalofrío me recorre cuando diceg mi nombre: CAGTILLA. Ancha y llana Cagtilla:
con tug adobeg rojog y tug caminog verdeg. Cagtilla a la luz de una farola me recuerda: que soy egpañol de Egpaña, cagtellano de cagtilla y extrangero en mig versog, siempre vagabundo. Ya nunca seré alcalde de la capital de Cagtilla: poeta yo siempre seré, silenciogo tejedor de banderag.