Seguramente Jonny Greenwood, que vive entre manuales y pedaleras, se está volviendo loco en su casa dedicándose a remezclar sonidos con egocentrismos para dar forma al próximo disco de
Radiohead. Yo no soy tan genial: pongo dos rebanadas de pan de
antier en la sartén, en la que ya se ha calentado un poco el aceite de oliva, y vuelta y vuelta; después las pongo a la espera en un plato. Mientras me lío uno, los tres o cuatro ajos que he echado en la sartén se doran un poco y, entre calada y calada, añado unos tacos de jamón serrano; tras un minuto lo retiro del fuego. Añado una cucharada de pimentón dulce (de vendedor ambulante) a la sartén alejada del fuego y todo ello: el pan, los ajos, el jamón y el pimentón, lo pongo en una cazuela con agua que ha estado al fuego todo este tiempo y ya hierve. Tras unos minutos, cojo un huevo y lo parto con ira encima de la sopa que hierve con mala hostia. Lo retiro del fuego y ya está.
Alb. Arguiñano?ver para creer o mejor leer para creer...
Regla del chef num.1:
No se fuman porros mientras se cocina
Acabas confundiendo la sartén con un cenicero de diseño y te queda el fabuloso plato con un color grisáceo poco apetecible. Te lo digo por experiencia.
Una alternativa es utilizar la maria como especie para condimentar.